Treinta usurpadores ya devolvieron llaves en viviendas de Casavalle
Publicado: 6/12/2018 18:54
Intendencia de Montevideo
Este jueves se hizo la cuarta tanda en lo que va del año. Esta vez incluyó a una prima y a dos hermanos de "la Gorda Mónica".
Cinco llaves de viviendas de la Unidad Misiones de Casavalle, más conocidas como Los Palomares, eran devueltas este jueves de tarde a las autoridades. Es una historia repetida este año: es la cuarta vez desde mediados de agosto que un grupo de personas formalizadas por usurpación y robo de agua y luz en ese barrio debían abandonar la zona.
En total, 30 personas han sido formalizadas por usurpación de viviendas en Casavalle. Todos estuvieron viviendo en casas que no eran de ellos, cuyos anteriores residentes habían sido expulsados, a veces con lo puesto, siempre bajo amenaza de muerte, por la banda conocida como "Los Chingas". Estos luego usaban esos inmuebles en beneficio propio, ya sea para alquilarlos terceros a precios irrisorios, para usarlos como depósito de armas o drogas, o como bocas.
"Esta es la mejor demostración que el que manda es el Estado. Y de que (a los usurpadores) no les vamos a dejar pasar una", dijo a ECOS el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Gustavo Leal. Antes del de este jueves, ya se habían producido devoluciones obligadas de llaves a mediados y fines de agosto y a principios de octubre.
Tras el operativo del miércoles, cinco personas pasaron por la Justicia por usurpación y robos de los servicios de agua potable y luz eléctrica. Ninguno tenía cómo comprobar que la casa era de ellos.
En tres de ellos, la fiscal Mónica Ferrero acordó con la defensa la suspensión condicional del proceso para L.K.L.A., J.C.P. y R.C.A., debiendo desocupar la casa, fijar nuevo domicilio y registrarse una vez a la semana en las respectivas seccionales de sus nuevos domicilios.
Los otros dos son hermanos de Mónica por parte de madre. Uno de ellos, M.F.S.G., fue condenado a ocho meses de prisión, sustituido por un régimen de libertad vigilada. Al otro, J.J.M.P., se le decretó 60 días de prisión cautelar ya que tenía antecedentes por narcotráfico.
Varias de las personas que han resultado desalojadas han debido ser realojadas por el Ministerio del Interior por el miedo de volver al barrio. Estas últimas detenciones significan un duro golpe a Los Chingas, que ya habían sido descabezados.